
Alejandro tenía la sensación que escapaba de huir y se iba.Estaba flotando en el nuevo día,estaba fuera de si,dentro de ella.
"Iba a otro sitio,no importaba cual,solo importaba viajar;quería salir,no quería llegar.
Escapaba de huir y me fui al fin a otro lugar,no preguntéis cual, desde el tren todo me da igual;
oler a lluvia,sentir el mar;
ver una balsa,un molino,la tierra despertar.
Desde el tren pienso en todo,en todos,pienso en...amar".
Esto se lo estaba repitiendo Alejandro a si mismo medio adormecido,casi soñando,entre traqueteo de tren y cabezada profunda.
Sonó un pitido al pasar por una pequeña estación que le hizo sobresaltarse,al mismo tiempo que llegaba el revisor,empezó a recomponerse en su asiento dejando escapar un leve bostezo y un pequeño estiramiento.Entonces el revisor le pidió su billete lo picó y le dijo:"pues yo no quiero salir y si quiero llegar,amigo",y se fue con una media sonrisa a picar el billete de una mujer que había en frente.A continuación,la mujer dijo:"dice cosas muy bonitas mientras duerme"(como justificándolo ante el revisor mientras se marchaba).Alejandro sonrojado miró por la ventana y mientras medio asentía a la mujer vio dos patos volando que salían de un humedal...

Bajó en otro lugar,le dio pena llegar. Entonces un pensamiento se apoderó de él:"quiero ser revisor,siempre en el tren,siempre viajar,escapar de huir".