Dani, la brujita,el sapo y la salamandra (cuento)

...Volaba en una escoba impulsada por aerosoles.Se perseguía así misma riéndose sin parar,como el perro que quiere atrapar su cola....
Dani pensó que era algo así como un milagro.Después de observarla un rato le dijo:
-yo me voy a mi casa,brujita-...y cuando ya se iba a marchar oyó:
-tu no vas a ninguna parte ,granuja!¿o qué te crees,que yo soy tu bruja de la suerte?No pequeño imbécil,ahora te enseñaré la diferencia entre mi escoba y tu escobilla de water.
Abrió la puerta y escapó a toda velocidad escaleras abajo;ahora vive en un estanque y dice "croak,croak".Y ella va a visitarlo con su cara de mala y él croa con su cara de sapo feliz y ella se ríe y le dice que siga así.
Con lo guapa que le parecía a Dani cuando la conoció paseando por los bosques frondosos...
Por las noches habla con otros sapos y le cuenta que algún día llegará un hada de verdad y los liberará de ser comida de alimañas,juego de niños y pasto de científicos,pero los otros sapos no le hacen caso y se ríen de él.Le dicen que es un sapo tonto e ilusorio,que se tiene que conformar con ser un sapo,y que cuanto mas croe mejor se sentirá.A Dani no le gusta croar,entonces empieza a soñar.
Una vez soñó que venía un hada,era bella, natural y despierta;sus ojos estaban llenos de vida.Le acompañaba un perro,moviendo la cola y dando vueltas sobre sí mismo recordándose su hechizo y a la brujilla volando.El perro lo miró y lo convertía en salamandra.
Cuando despertó los otros sapos querían devorarlo,y él intentaba pedir explicaciones,y fue cuando se dio cuenta que estaba hablando el lenguaje de las salamandras y los sapos no le entendía,curiosamente él si los entendía a ellos.
Los sapos empezaron a perseguirlo, con sus saltos avanzaban mucho mas de lo que el podía correr.Entonces fue rápido en pensar y cayó en la cuenta de su nueva condición de salamandra dejando su cola desprender.Mientras se alejaba vio como su cola dando vueltas sobre si misma hipnotizaba a los sapos,lo que le permitió escapar de ser devorado.Desde entonces Dani ya no utiliza la expresión "es la pescadilla que se muerde la cola" sino "es la salamandra que se desprende de su cola" o "es la cola que engaña a los sapos".


El caso es que el desprenderse de su cola le sirvió para romper su hechizo y poder contar así este cuento.